El FALSO YO de los/as sobrevivientes del abuso narcisista/psicopático

Seguro eres una persona con muchas capacidades, virtudes, defectos, posibilidades y oportunidades para desarrollar tu vida al máximo posible. Quizás tienes una gran empatía y compasión por quien está sufriendo, entiendes cuando algo hiere a alguien y también cuando una persona es feliz y está disfrutando. Entiendes muy bien sobre sentimientos, tanto positivos como negativos y los sabes captar en los demás y también en ti mismo. Llevas un conjunto de valores como la paz y la libertad, la lealtad y el respeto, entre otros, con los cuáles te mueves en la vida. Te indignan las injusticias y la maldad en cualquiera de sus formas, aunque perdonas muy fácilmente, y vuelves a comenzar. Tienes principios claros, y te gustaría que así fuera en los demás. Aceptas a los otros como son, inclusive a costa de dejar que sobrepasen ciertas barreras. Valoras la familia, la amistad y el amor y quizás son tus pilares básicos.

Tienes metas a corto y largo plazo, sueños y hasta proyectos de vida, tienes deseos y necesidades específicas y todo este combo junto con el paquete de tus conductas, hábitos, pensamientos, y reacciones emocionales, van a conformar tu personalidad y tu sentido del “yo”.

Es decir, conforman tu identidad: un conjunto de rasgos o características de una persona que permiten distinguirla de otras en un conjunto; es la circunstancia de ser una persona en concreto y NO OTRA, determinada por un conjunto de rasgos o características que te diferencian.

La identidad tiene cierta estructura y se va conformando a medida que nos vamos desarrollando, desde que somos pequeños. Vamos a ir quitando y agregando elementos nuevos, reflexionando y adaptándonos al entorno y a los tiempos, pero de todas formas, siempre hay una base muy sólida, que luego es muy difícil que se transforme y se cambie por completo.

Pero más allá de estos conceptos, lo importante acá es: ¿Entiendes lo que eres, cómo eres y en qué te diferencias de lo que NO eres? ¿Tienes sentido de “ti mismo/a”? Estas preguntas son muy importantes porque, al momento de compartir tu tiempo y espacio con personas abusivas y manipuladoras, éstas comienzan desde temprano a erosionar tu identidad.

¿Cómo? a través de la manipulación y el abuso mismo, por supuesto, sobre todo utilizando una herramienta muy peligrosa y efectiva para ellos: el gaslighting (en español sería “luz de gas”, en Argentina podría asimilarse al término “cortina de humo”). Con ésta técnica ellos confunden a sus víctimas, mezclando la realidad con mentiras y estas incluyen situaciones concretas, como un evento pasado, una frase o charla que tuvieron donde distorsiona las palabras, alguna promesa que nunca hiciste, una “pérdida” ocasional de algún objeto, y la insinuación de su parte, de que “no recuerdas las cosas”, de que “estás volviéndote loco/a” o que “les estás mintiendo”. La idea es distorsionar tu PERCEPCIÓN de las cosas, y de a poco, CAMBIAR tu realidad por la realidad psicopática en la que él o ella está. Es una técnica muy eficaz para ingresarte y encerrarte en su burbuja, de la cual te costará mucho esfuerzo salir.

Por supuesto que la luz de gas va dirigida más que nada, a tu identidad, porque la persona abusiva que te cazó y que está haciendo este trabajo contigo, se ha sentido atraída por esas características de las que hablamos al principio. Como un bicho de luz se siente atraído a una lámpara encendida.

Ellos/as por su vacío, sienten la necesidad de ir a buscar esos rasgos que justamente no tienen, como ser las ganas de vivir, la empatía verdadera, las emociones profundas, etc., o sea, las personas llenas de luz y recursos. Cuándo los encuentran, se les enciende la alarma de “presa a la vista”.

Idealizan estos recursos y rasgos. Creen en algún punto, que podrán ROBÁRSELOS a la víctima. Pero estas características ¡no se pueden robar! es decir, no se puede quitar a una persona la capacidad para caerse y levantarse en cualquier infortunio, por ejemplo, y colocarlos en la propia identidad, simplemente es imposible. Es por esto que los psicópatas y abusadores se dedican a DESTRUIR a sus víctimas objetivo.

El gaslighting está a su servicio en este punto, el destruir la percepción de la realidad de la persona y hacerle creer, todo lo que el o la psicópata decida que ahora va a ser “la realidad”. Esto incluirá tu identidad.

Es por eso que te dirá que eres inútil y un bueno para nada, que estás mal de la cabeza, que tu memoria no funciona y que incluso eres tú la mala persona. Dentro de su estrategia de gaslighting, de confundirte en tu contexto, ocultando cosas y haciéndolas aparecer, o cambiando la versión de ciertos hechos, también aplicará una devaluación insultando tu persona, tu integridad y dignidad; pero además, luego de desestabilizarte y en algún punto, vaciarte por dentro, comenzará la proyección: todo lo que el/la psicópata te está haciendo a ti, todo lo que esa persona es, sus intenciones, sus pensamientos, emociones, es decir, los elementos de SU identidad, los colocará en TU persona. Entonces, la loca eres tú, el que miente eres tú, quien está volviéndolo/a loco eres tú, el malo/a, el desagradecido/a, el que no le importa la relación, el que tiene celos y envidia, resentimiento, odio y el culpable de todo eres TÚ.

Como todo este proceso es silencioso y prácticamente invisible, o imperceptible para la víctima, ésta no se percata de que cada “pequeña” situación confusa, es un granito de arena que está ayudando a que su salud mental y emocional se venga abajo por completo a largo plazo. Todas estas cosas ocurren de forma intermitente, es decir, no es algo que ocurra una tras otra, sino que el psicópata se encarga de mezclar la luz de gas con momentos de falso cariño y compañerismo, para hacer más sólida esa confusión y que el vínculo traumático se fortalezca. Son situaciones que pasan casi sin darte cuenta ni poder predecirlas de ningún modo.

Otra cuestión a tener en cuenta, es que, cuando entra un psicópata a tu vida, éste se va a encargar de ganarse TU CONFIANZA, y van por todo: TU PLENA CONFIANZA EN ELLOS. Pasaste por la época del bombardeo de amor y sabes muy bien a qué me refiero con que COMPRAN a sus víctimas. Le venden la imagen ideal de pareja, de amistad, compañero, o de familia, de lo que sea que esté necesitando el objetivo. Son vendedores infalibles y grandes estafadores más que nada, porque todo lo que te vendieron es una MENTIRA, puro humo.

Tú confías en ellos, ¿por qué te mentirían? ¿por qué te diría tal o cual cosa, si no fuera que realmente lo piensa?

Seguro estas preguntas pasaron por tu cabeza en esas circunstancias de confusión y devaluación. Confías en él/ella y hasta lo idealizas, así que vas a CREER lo que te diga. Si dice que sos estúpido/a, lo crees, si dice que mentís, le crees, si dice que le estás haciendo daño, que eres realmente una persona horrible, lo crees…

Es un conjunto de cosas, un arsenal de herramientas de manipulación que tienen un objetivo bien definido. Los psicópatas DEDICAN su vida a destruir a sus suplementos, es su meta y simplemente se ponen en acción; ya no preguntes, “¡¿cómo puede ser que haga o diga tal cosa?!”, ese es su verdadero SER, esa es su identidad. El problema es que te metieron a su burbuja, y lograron a través de un trabajo de hormiga muy bien planificado y puesto en acción: Hacer que poco a poco te alejes de TI, de TU identidad, te vacíes de ella y llenarte con proyección, de SUS RASGOS.

Además, quieras o no, convivir con estos personajes, siempre hace que se te peguen algunas de sus mañas, como el tener baja autoestima (si, ya se, en ellos no parece que la tuvieran, pero si…la realidad es que no tienen autoestima, por eso viven prendidos de los demás, como los parásitos. Ellos son parásitos) o la cultura del chisme. Pero esto no es nada comparado con la inducción que te hacen a una identidad falsa, que es una construcción hecha a base de proyección. Las cosas por las que las víctimas se sienten culpables, son elementos falsos que el psicópata depositó en ella. La culpa por ser “mala” y “abandonarlo” por ejemplo, que es muy común. Es una culpa falsa, ellos te entrenan para que pienses así. Ellos trabajaron todo ese tiempo para moldearte a su manera y a través de su mecanismo estrella, la “inoculación”, hacen que veas la realidad, a los demás y a ti mismo, como ellos quieren que lo veas.

La sanación te lleva de vuelta a ti mismo, a conocerte y reconocerte como individuo merecedor de respeto por un lado y con muchos valores y capacidades por el otro. Cuando te descubres dentro de esta burbuja del mal, toca tomar responsabilidad por comenzar a transitar el camino del autoconocimiento, porque cuando sepas bien quién eres y estés muy bien parado sobre tus pies, puedes construir límites sanos para indicar a los demás, qué dejas entrar en tu vida, y qué no.

¿Recuerdas que dijimos al comienzo que la identidad tiene cierta estructura y que en su base sigue siendo la misma? esto significa que TU identidad aún sigue ahí, pero está aplastada, estás confundido y muy herido/a emocionalmente, pero eso no quita que ella siga ahí, esperando a que la rescates y la reivindiques.

¡Adelante!